Por Luisa Fuentes
¡Salvemos al planeta! ¡respetemos los derechos de los animales! ¡no más crueldad hacia los seres vivos! ¡cuidemos nuestra salud! Estas son algunas de las principales razones que tienen las personas para convertirse al veganismo, y sin lugar a dudas son motivos extraordinarios. Pero ¿En qué punto se traspasa la línea entre grandes ideales y la locura?
Pues para Cilla Carden, habitante de Australia, no parece existir dicha línea divisoria, ya que esta vegana demandó a sus vecinos por hacer tranquilas carnes asadas en su patio.
Si, leyeron bien…. Por organizar carnes asadas. Cilla asegura que le es imposible disfrutar su propio patio por el hedor de la carne cocida proveniente del patio de sus vecinos. Carden se atrevió a llevar su caso al Tribunal Administrativo del Estado y la Corte Suprema de Australia Occidental y como era de esperarse, este fue desestimado.
En una entrevista con Nine News, Cilla aseguró que sus vecinos hacen todo tipo de cosas para enfadarla; desde constantes carnes asadas en sus patios, fumar cigarrillos y hasta jugar baloncesto de una manera “muy ruidosa”. En palabras de Cilla Carden: “Ha sido devastador. Ha sido una agitación. Ha sido un malestar. No he podido dormir”
¿Mucho drama?
Dada la peculiaridad del asunto, las demandas de Cilla se han hecho públicas en distintos noticieros y diarios en Australia. Y como era de esperarse… no faltaron los chistosos que al enterarse de esto han comenzado a viralizar un evento en Facebook en donde se convoca a los australianos a organizar a una carne asada masiva fuera del patio de Cilla.
Definitivamente Cilla Carden nos ha regalado a nosotros una historia muy peculiar para contar y a todos aquellos ociosos, les ha regalado un excelente motivo para reunirse a una carne asada.